Seguramente habrás oído sobre el arroz a la cubana, un plato sencillo y clásico de arroz blanco, acompañado de huevos fritos que se prepara, sobre todo, en muchos países de habla hispana. Esta delicia se ha convertido en una tradición en muchos hogares, porque además de su rico sabor, lleva consigo una carga de proteínas y vitaminas que nunca deben faltar en tu mesa.
También es posible que creas que el arroz a la cubana es propio de la isla caribeña, sin embargo, te sorprenderá leer que su origen es español y que proviene de las Islas Canarias de España, ¿Curioso verdad? A pesar de esto, se cree que si hay algún tipo de influencia de la isla cubana, vinculada con la invención de este platillo, esto es debido al alto intercambio que existía cuando Cuba formaba parte de las colonias españolas.
La popularidad con la que se conoce el arroz cubano ha hecho que se haya diversificado y universalizado, tanto así que, hoy por hoy, son muchas las variedades de arroz a la cubana que se preparan. Hay tantas variaciones de esta receta que, por ejemplo en Filipinas, combinan el arroz con carne molida y verduras; mientras que en Perú, agregan salchichas fritas. Hay países en donde se añade, incluso, plátano frito. Particularmente en España, el sofrito de este arroz es una salsa roja que lleva tomates triturados, cebolla, ajo y pimientos salteados en aceite de oliva.
El arroz a la cubana no deja de ser la comida perfecta para servir una rica cena en un día de esos en donde no tenemos mucho tiempo para cocinar. Lo mejor de todo, es que podemos ajustar los ingredientes con lo que tengamos a la mano y degustar un arroz a la cubana a nuestro propio estilo.
En definitiva, sea cual sea el componente adicional, lo que caracteriza a este sencillo y delicioso plato es la esencia de sus dos elementos principales: el arroz blanco y el huevo frito. Y, si quieres agregarle un toque personal, queda por tu cuenta. En FrutaMare, tu tienda con los mejores ingredientes, podrás encontrar todo lo que necesites para preparar tu propia versión de arroz a la cubana.
Lista de la compra para preparar Arroz a la cubana
El Arroz a la Cubana es un plato que consiste en arroz blanco y un huevo frito. También puede incluir salsa de tomate y plátanos fritos. Pero si deseas agregar un toque especial, puedes añadir alguna fruta cítrica (como naranjas) para darle un toque de sabor diferente a la salsa o simplemente para adicionar un aroma distinto.
- Arroz blanco
- Huevos
- Plátanos
- Naranjas
- Tomates frescos o una lata de tomates triturados
- Cebollas
- Dientes de Ajo
- Aceite de oliva
- Albahaca u orégano (opcional)
- Sal
Preparación del Arroz a la cubana
Vanos a ver una receta de arroz a la cubana para preparar una comida para 4 personas. Para ello se requiere de una taza de arroz, 4 huevos, 4 plátanos, tomates (por lo menos 2 o 3), 1 cebolla pequeña, aceite de oliva (1 taza), sal y si gustas, añade zumo de naranja, albahaca u orégano para aromatizar y dar un toque de sabor diferente.
Primer paso: Preparación del arroz
Para preparar un arroz blanco suelto y seco se coloca una olla con dos tazas de agua con sal. Luego se rocía con una cucharada de aceite de oliva otra olla aparte y, una vez que esté caliente, se añaden unos dientes de ajo y se cocina hasta que esté fragante (esto debe tardar entre unos 3 a 4 minutos).
A continuación, se agrega el arroz (1 taza) y se cocina revolviendo constantemente hasta tostar de forma ligera. Ahora, se vierten las dos tazas de agua hirviendo. Se tapa la olla y se cocina a fuego lento sin revolver. Se debe vigilar que el agua se absorba y que el arroz quede poroso (18-20 minutos). Una vez que esto ocurra, retirar la tapa y esponjar con un tenedor.
Segundo paso: Preparación del sofrito (la salsa)
Toma una cacerola mediana y rocíala con unas tres cucharadas de aceite de oliva. Cocina a fuego medio-bajo. Procede a agregar media cebolla (si es muy grande) o una cebolla pequeña picada y añade media cucharadita de sal. Revuelve constantemente y cocina hasta dorar y ablandar las cebollas (esto se puede tardar de 8 a 10 minutos).
Procede a pelar, rallar o triturar los tomates. Agrega los tomates a las cebollas doradas, añade el zumo de naranja y la albahaca u orégano a tu gusto. Continúa cocinando a fuego lento hasta que veas que los tomates comiencen a romperse, esto suele ocurrir luego de 8 o 10 minutos de cocción. Deja enfriar a temperatura ambiente y utiliza una licuadora, inmersión o algún tipo de soporte para hacer puré la salsa.
Tercer paso: Preparación de los huevos
Usa un sartén antiadherente y agrega media taza de aceite de oliva. Calienta con una llama media-baja y procede a freír un huevo por ración. Como la preparación es para cuatro personas, deberás freír cuatro huevos. Fríe los huevos con la yema hacia arriba; estarán listos cuando la clara esté totalmente cocida. Retira los huevos del aceite.
Cuarto paso: Preparación de los plátanos
Para esta preparación necesitarás cuatro plátanos. Cada plátano debe cortarse de manera transversal o por la mitad y luego procede a freír hasta que se doren.
Quinto paso: Servir
Una vez que tengas todas las preparaciones listas: arroz, sofrito, huevos y plátanos, puedes servir. Coloca en cuatro platos una porción de arroz y haz un hueco en el centro de cada uno y vierte en él la salsa. Finalmente, coloca los huevos y los plátanos como lo desees.
Beneficios del arroz a la cubana
Además de ser un plato sencillo, económico y de fácil preparación, el arroz a la cubana es una comida que carga una fuente proteínica, de hidratos de carbono y otros componentes vitamínicos indispensables para la salud de nuestro organismo. De manera que, es uno de los platos cuya relación coste-valor nutricional-elaboración resulta de las más equilibradas que existen en el mundo.
Plato cargado de proteínas, vitaminas y minerales
La receta de arroz a la cubana de origen cubano u español tiene una carga proteínica importante y necesaria para el organismo. Gran parte de esa carga se debe al huevo. El huevo, principalmente, es una fuente de proteínas, en él se encuentran unos 6.29 gramos de proteína entre la clara y la yema. Además, contiene ácido fólico, riboflavina, vitamina B12, niacina, calcio, hierro, cobre, zinc y sodio; sustancias que nuestro organismo necesita para una optimización de sus funciones vitales.
Por otra parte, se considera que el arroz a la cubana es un súper alimento; en principio, como se ha dicho, contiene una proteína con un alto valor biológico (el huevo). Y, el arroz, que también proporciona vitaminas como A, B12, D, K, niacina, tiamina y la riboflavina aporta, además de minerales, antioxidantes como luteína y zeaxantina.
Alto poder antioxidante
El alto poder antioxidante de nuestro platillo de arroz a la cubana, lo refuerza el uso de salsa de tomate casera. El tomate es rico en minerales y vitaminas, convirtiéndose en un excelente acompañante para mantener tu salud. Uno de los componentes principales del tomate es el licopeno, un antioxidante natural que ayuda a reducir el colesterol y favorece la protección cardiovascular.
Gran aporte de hidratos de carbono de lenta absorción
Además de proteínas, fibra, minerales y vitaminas; el arroz a la cubana contiene hidratos de carbono de absorción lenta (sobre todo, si empleamos arroz integral), y actúa como una gran fuente de energía para el cuerpo. Gracias a este aporte, podemos controlar los niveles de azúcar en la sangre, prevenir enfermedades como la hipo e hiperglicemia y evitar la ansiedad.
Y, si usas arroz integral, tu platillo estará cargado de fibra. La fibra, especialmente, actúa como un escudo protector contra las células cancerosas. Asimismo, su bajo contenido de colesterol lo convierte en un alimento ideal para controlar estos niveles de grasa en la sangre. También, el arroz integral es bajo en sodio, por lo que se recomienda para quienes padecen de hipertensión.
Los ingredientes son asequibles, fáciles de conseguir, su preparación es sencilla y se puede personalizar
Por último, tenemos que este platillo es económico, de fácil preparación y muy variable. Como base, debemos contar con huevos y arroz. Y esto, no será un problema, ya que en cualquier supermercado o establecimiento habrá lugar para conseguirlos y adquirirlos a precios accesibles.
Un plato que puede ser preparado por toda la familia, incluso, por jóvenes y adolescentes para quienes resulta una comida rápida y muy cómoda de cocinar, sobre todo, en esos días de exámenes u ocupaciones.
Además, esta receta puede sufrir cualquier variación, de hecho, puedes agregar plátanos, zumo de naranja o jugar con los ingredientes que tengas en casa, y con ello, resolver en esos momentos en lo que necesitas hacer una cena sencilla, deliciosa, nutritiva y con un toque diferente.
Cómo hacer arroz blanco
Preparar arroz blanco a veces puede resultar no tan fácil como parece. Sin embargo, existen recetas sencillas con resultados muy positivos. Además, hay diferentes formas de preparar un buen arroz blanco. Puede ser preparado a partir de las siguientes tres formas.
Arroz blanco compacto
Para obtener un arroz blanco compacto, el procedimiento es el siguiente:
-
- En una cazuela añadimos dos cucharadas de aceite de oliva por cada taza de arroz.
- El arroz se sofríe. Procedemos a calentar el aceite y una vez que se caliente, se agrega la medida de arroz.
- Se vierten dos tazas de agua y media por cada taza de arroz y se cocina con fuego alto durante, por lo menos 4 minutos o, hasta que comience a hervir.
- Se añade sal al gusto.
- Se tapa el arroz y se baja la temperatura de cocción (se cocina a fuego medio)
-
- Vigilamos la cocción y cuando apreciemos que ya no queda casi agua y comienzan a quedar agujeros entre los granos de arroz, se baja al mínimo la temperatura y se cocina por unos dos o tres minutos más.
- Luego, apagar el fuego y dejar en reposo por unos 5 minutos. No destapar. Durante este reposo, el arroz terminará de absorber el agua y los granos deberán separarse un poco más.
- Después del tiempo de reposo, destapar y probar. Te quedará un arroz compacto y quizás un poco duro. Si prefieres un arroz menos duro, deja reposar tapado por más tiempo.
- Finalmente, destapar y degustar un arroz blanco compacto perfecto.
Arroz blanco suelto
Para los que prefieren cocer arroz blanco y que quede más suelto, se recomienda seguir la siguiente receta de arroz:
-
- Lava la cantidad de arroz que desees cocinar. Se lava el arroz con la intención de eliminar el almidón lo más que se pueda. Este proceso lo puedes hacer usando un colador y colocándolo directamente en una corriente de agua o, lavándolo en un bol grande unas dos o tres veces hasta que obtengas un agua más clara.
- Colocamos la cazuela en nuestra estufa.
- Se añade abundante agua (dos medidas y media por cada una de arroz), sal y aceite al gusto. Todo va junto.
- Se deja hervir por unos 4 minutos hasta que se evapore el agua.
- Cuando ya no se vean burbujas de agua sobre la superficie del arroz, se procede a bajar la temperatura y a tapar la cazuela.
- Se deja en cocción durante unos 15 minutos. Puedes ir probando el arroz durante este tiempo y si consideras dejarlo por más tiempo, no hay problema.
- Luego, destapar y revisar. El arroz debería estar al dente.
- Apagar la estufa y dejar en reposo (sin destapar) durante unos dos o tres minutos.
- Al final, tu arroz blanco suelto estará perfecto y listo para comer.
Arroz líquido
Si queremos preparar un arroz caldoso, la clave está en agregar abundante agua (por cada porción de arroz, tres porciones de agua). Además, se suele utilizar un arroz cuyo grano sea algo más gordo (con mayor contenido de almidón). El procedimiento es como sigue:
- Se colocan todos los ingredientes en la cazuela (arroz, agua, sal al gusto)
- Se cocina el arroz por unos 20 minutos hasta que los granos estén blandos
- La idea de un arroz caldoso es no dejar secar. Así que en este punto: con el arroz cocido y un poco de líquido en la cazuela, se debe servir. Si se deja por más tiempo el arroz seguirá absorbiendo líquido.
El arroz a la cubana es una forma creativa y diferente de comer el típico arroz blanco. Lo mejor de este plato es que es una receta muy sencilla y fácil de preparar. Basta tener arroz y huevos y en cuestión de minutos, degustarás un rico platillo. También lo puedes preparar al mejor estilo español, agregando una exquisita salsa de tomate y un plátano frito. ¡Realmente una verdadera delicia!
Este plato también es rico en fibra, hidratos de carbono de absorción lenta, minerales, vitaminas y proteínas, y su contenido calórico es bajo. Un platillo cargado de muchos beneficios para el organismo. De hecho, gracias a sus ingredientes, degustar un delicioso arroz a la cubana: disminuye las posibilidades de desarrollar enfermedades cancerígenas, no afecta los niveles de azúcar en la sangre, reduce la ansiedad y, en algunos casos, sobre todo cuando se usa arroz integral, es recomendable para personas hipertensas y con problemas cardiovasculares.
Sin lugar a duda, el arroz a la cubana es una forma deliciosa, nutritiva, diferente y variada de comer el acostumbrado arroz blanco.
Así que, prepara el arroz blanco como lo prefieras: compacto, suelto o líquido; fríe tus huevos, combina con salsa de tomates naturales, agrega plátano frito si lo deseas; crea, ponle un sabor cítrico o un aroma diferente y dale tu propio toque personal. No te quedes con la receta en la mano, ¡Anímate, hazte un delicioso plato de arroz a la cubana a tu gusto!
▷ El Mejor Arroz con Verduras que hayas probado
Este delicioso arroz con verduras es una buena opción como plato principal para una buena alimentación
Tipo: Plato principal
Cocina: Cubana
Palabras clave: Arroz a la cubana
Rendimiento de la receta: 4 personas
Tiempo de preparación: 5M
Tiempo de cocinado: 55M
Tiempo total: 60M
Ingredientes de la receta:
- Arroz blanco
- Huevos
- Plátanos
- Naranjas
- Tomates frescos o una lata de tomates triturados
- Cebollas
- Dientes de Ajo
- Aceite de oliva
- Albahaca u orégano
- Sal
Instrucciones de la receta:
Primer paso:
Para preparar un arroz blanco suelto y seco se coloca una olla con dos tazas de agua con sal. Luego se rocía con una cucharada de aceite de oliva otra olla aparte y, una vez que esté caliente, se añaden unos dientes de ajo y se cocina hasta que esté fragante (esto debe tardar entre unos 3 a 4 minutos).
Segundo paso:
Toma una cacerola mediana y rocíala con unas tres cucharadas de aceite de oliva. Cocina a fuego medio-bajo. Procede a agregar media cebolla (si es muy grande) o una cebolla pequeña picada y añade media cucharadita de sal. Revuelve constantemente y cocina hasta dorar y ablandar las cebollas (esto se puede tardar de 8 a 10 minutos). Procede a pelar, rallar o triturar los tomates. Agrega los tomates a las cebollas doradas, añade el zumo de naranja y la albahaca u orégano a tu gusto. Continúa cocinando a fuego lento hasta que veas que los tomates comiencen a romperse, esto suele ocurrir luego de 8 o 10 minutos de cocción. Deja enfriar a temperatura ambiente y utiliza una licuadora, inmersión o algún tipo de soporte para hacer puré la salsa.
Tercer paso:
Usa un sartén antiadherente y agrega media taza de aceite de oliva. Calienta con una llama media-baja y procede a freír un huevo por ración. Como la preparación es para cuatro personas, deberás freír cuatro huevos. Fríe los huevos con la yema hacia arriba; estarán listos cuando la clara esté totalmente cocida. Retira los huevos del aceite.
Cuarto paso:
Quinto paso:
5