Salsa de manzana

La fruta de la pasión o del pecado, como quieras verla, la manzana, es una deliciosa y jugosa tentación para los amantes de las frutas frescas.

Desde zumos hasta postres se pueden hacer con su pulpa, e incluso es una excelente acompañante para platos salados. La imaginación, como siempre, es el límite cuando se trata de la preparación de deliciosos y creativos platos.

Hoy para darle ese toque especial a tus comidas, vamos a darte la receta de la preparación de la salsa de manzana, pero como regalo adicional, te enseñaremos a prepararla en dos variantes: dulce y salada. Sigue con nosotros y atrévete a innovar en tu cocina.

Lista de la compra para hacer Salsa de manzana

Para obtener esta salsa no necesitas muchos ingredientes, pero seguro que sí vas a disfrutar de un sabor increíble.

La suavidad y delicadeza de esta preparación es comparada con la Vichyssoise, una crema salada a base de patatas, aceite de oliva y otros ingredientes, que resulta ideal para esos días de frío cuando quieres sorprender a los comensales en tu mesa.

Para que sepas lo que necesitarás, primero te diremos los ingredientes para la salsa de manzana salada y luego la dulce.

Ingredientes (salada)

• 3 manzanas rojas.
• 1 hoja de laurel, que puede ser seca.
• Sal y pimienta molida, a gusto.
• Caldo de verduras o de carne, también puedes usar agua.

Ingredientes (dulce)

• 3 manzanas rojas.
• El zumo de un limón grande.
• 3 cucharadas de azúcar o miel, a tu preferencia.
• 100 ml de agua.

Preparación de Salsa de manzana

Esta salsa, de fácil elaboración y muy solicitada durante los meses de verano, tiene mucho en común por su versatilidad y frescura con otra muy popular receta: la crema de melón. Ambas son suaves en textura y muy sabrosas al paladar, claro está, gracias a su ingrediente particular: la fruta.

Los azúcares presentes, tanto en la manzana como en el melón, son compuestos de glucosa, fructosa y sacarosa, y están combinados con fibra, por lo que resultan mucho más sanos para el organismo que el azúcar de mesa, que es 100% sacarosa.

Por otra parte, ambas frutas tienen un contenido moderado, entre 8 y 10 gramos de azúcares por cada 100 gr de fruta.

Veamos entonces cómo es el procedimiento para obtener una rica salsa de manzana, en sus dos variantes.

Cómo preparar la salsa de manzana salada

Primer paso

Lo primero es pelar, descorazonar y cortar en pequeños cubos de aproximadamente 2 centímetros cada una de las manzanas.

Segundo paso

Los colocas en una olla mediana, le agregas un poco del caldo de verduras, carne o agua y la hoja de laurel.

Tercer paso

La llevas a la hornilla a fuego alto hasta que comience a hervir.

Cuarto paso

Tras unos 10 o 15 minutos de cocción, aproximadamente, cuando la manzana esté muy blanda, la retiras del fuego y la dejas reposar un rato.

Quinto paso

Le quitas la hoja de laurel y con la ayuda de un triturador de patatas o un batidor de inmersión mueles la mezcla hasta que se forme una pasta suave. En este punto le agregas la sal y la pimienta a tu gusto.

Sexto paso

Puedes dejarla reposando a temperatura ambiente o puedes ponerla en el refrigerador. Cuando la vayas a usar, basta con darle unos minutos en el horno de microondas o al baño maría.

Esta salsa es la acompañante ideal para un solomillo de cerdo o una carne asada, aunque en realidad le da un toque delicioso a cualquier plato.

Ahora, la receta para la otra variante, que seguramente te resultará perfecta para los pequeños.

Cómo preparar la salsa de manzana dulce

Primer paso

El primer paso es igual que para la anterior: pelar, descorazonar y trocear la manzana.

Segundo paso

En una olla mediana se coloca el agua y la manzana ya cortada, se le añade el azúcar o la miel, según prefieras, y el zumo de un limón.

Tercer paso

Llevas la preparación a la hornilla, tapas la olla y la colocas a fuego medio entre 20 y 30 minutos. Dependerá del tipo de manzana el tiempo que tarde en ir ablandándose.

Cuarto paso

Debes remover constantemente con una cuchara de madera, de plástico o de silicón, preferiblemente. Evita usar cucharas de metal.

Quinto paso

Transcurrido el tiempo, apagas el fuego y la dejas reposar durante al menos 5 minutos.

Sexto paso

Cuando ya esté más fría, verifica que no haya quedado muy espesa. Puedes añadir un poco más de agua, si es necesario.

Séptimo paso

Lleva la mezcla al vaso de la licuadora o utiliza una batidora de inmersión.

Octavo paso

Bate por unos cuantos segundos hasta que veas que la mezcla es una crema de fina textura.

Noveno paso

Vierte la preparación a un recipiente de vidrio con tapa y lo llevas al refrigerador.

Décimo paso

Si deseas, le puedes poner una pizca de canela molida cuando la vayas a servir para darle un toque adicional.

Si tienes niños pequeños en casa, esta es una buena opción para eliminar las compotas comerciales de su dieta. Y si eres amante de los postres sanos, esta salsa puede ser también lo que estabas buscando para mejorar tu dieta diaria.